Esta semana recorrí las provincias cuyanas y lo interesante de ese itinerario fue la cantidad de obras terminadas y en avance que había para visitar. La última vez que había ido a San Juan anunciamos el comienzo de las obras para el aeropuerto; hoy la transformación ya está avanzada.

El aeropuerto de San Juan había quedado chico y desactualizado; fue construido en la década de 1960 y desde entonces no se le hizo una obra de magnitud. Nosotros estamos avanzando firme en la construcción de un aeropuerto nuevo. Hoy se está desarmando el edificio de la terminal para que en unas semanas empiece la demolición y se alce un edificio desde cero. En abril se empezarán las obras de pistas, calles de rodaje y la ampliación de la plataforma, que es donde estacionan los aviones cuando no operan. Para este año estará lista una buena parte de los trabajos, que luego se continúan. Será uno de los 31 aeropuertos que tendrán obras finalizadas para fin del 2019. Así este aeropuerto será un orgullo de los sanjuaninos y volverá a San Juan un actor protagónico de la Revolución de los Aviones. En esa misma dirección, estamos trabajando para que las low cost también lleguen a esta ciudad y los sanjuaninos tengan más ofertas.


Después de recorrer el aeropuerto apenas nos bajamos del avión, fuimos a inaugurar el Acceso Sur a la ciudad (sobre la RN 40). Nuevamente, una vez más, esta obra fue prometida durante décadas, por diferentes gobiernos, y nunca se hizo. Nosotros inauguramos una infraestructura de calidad mundial que va a traer a este acceso más seguridad vial, que va a reducir los tiempos de viaje y que, en conjunto con la autopista a Mendoza, va a bajar los costos logísticos, es decir, los costos que enfrentan quienes producen para llegar con sus productos a las góndolas de los supermercados y a los puertos de exportación.


De allí nos fuimos a Mendoza a visitar primero la Variante Palmira en ejecución; sí, otra obra que se prometió durante décadas y que recién nosotros iniciamos. Está pensada para que el tráfico pasante (es decir, el tráfico que atraviesa una ciudad para ir a un destino más lejano) tome un desvío para pasar por el costado de la ciudad de Mendoza en vez de por el medio. Esta decisión, por supuesto, tiene que ver con la seguridad de los habitantes de Mendoza y con la fluidez y reducción de tiempo de viaje del tránsito, con una buena proporción de camiones. Además forma parte de una inversión mayor en el Sistema Cristo Redentor, un conjunto de obras que incluyen variantes, pavimentaciones y puentes para mejorar la fluidez del intercambio con Chile en este paso internacional de tanta relevancia.
Finalmente, seguimos camino por la ruta 7 hasta llegar a la entrada de los túneles Los Libertadores y Caracoles. El segundo hace 30 años está en desuso y nosotros lo vamos a rehabilitar como un túnel vehicular para duplicar la capacidad de este paso internacional.


Entre todas las acciones estamos construyendo ese país mejor con el que soñamos. Y sabemos que, al final del día, si queremos ir hacia delante, tenemos que tener siempre la mirada puesta en el futuro.