Más de doscientos centros urbanos del mundo han implementado, con excelentes resultados, el uso de la bicicleta como medio de transporte público. En París, unos cien mil vecinos y visitantes utilizan a diario el sistema de alquiler de bicicletas Vélib. Ahora esta movida llega a Buenos Aires. Nuestra ciudad es ideal para desarrollar esta opción de movilidad, y creo que los porteños estamos más que listos para comenzar a aprovechar sus beneficios.

El sistema de transporte público en bicicleta es, sobre todo, práctico. Porque además de ser beneficiosa para la salud y muy eficiente en términos ecológicos, la bicicleta nos permite ahorrar tiempos de viaje y esto cambiará paulatinamente la forma en que nos movemos por la ciudad e interactuamos con ella.

En diciembre, habilitamos cien unidades, disponibles en forma totalmente gratuita en las primeras tres estaciones: Retiro, Facultad de Derecho y Aduana. En lo que va de enero pusimos en marcha tres estaciones más: Plaza Roma, Plaza Italia y Parque Lezama. Seguiremos trabajando hasta completar las doce estaciones en los próximos dos meses. Registrarse es muy fácil; entender cómo funciona el sistema, también. Y si además querés conocer dónde están ubicados los puntos de entrega, basta con ingresar en www.buenosaires.gob.ar/mejorenbici.

Estamos muy entusiasmados con esta prueba piloto, que llegará a contar con quinientas bicicletas y doce estaciones en los próximos meses. También estamos expectantes, porque sabemos que su funcionamiento depende de un cambio cultural importante: sobre todo hay que entender que se trata de un beneficio para todos y asumir el compromiso de utilizar correctamente esta nueva alternativa.

¿Podremos lograrlo? Yo creo que sí. Por eso, ya estamos trabajando en una segunda etapa, que incluirá un sistema automático, mayor cobertura, cinco mil bicicletas y doscientas estaciones. En el ínterin, ¡los invito a subirse a una bici y ser protagonistas de esta verdadera revolución en términos de movilidad urbana!