El 4 de mayo, cuando se cumplían 100 años del nacimiento de Jacobs, Google le dedicó un simpático Doodle que la mostraba con los lentes de marco grueso que la identifican. Quizá no todas la conozcan, pero Jacobs fue una de las pioneras en darle una filosofía a la movilidad sustentable. Fue una de las primeras pensadoras en elaborar el concepto de urbanismo de proximidad, que tiene por principios la valoración de las distancias caminables, el fortalecimiento de los espacios públicos de encuentro e interacción social y la afirmación de lo local.
[lightbox link=»http://www.guillodietrich.com/wp-content/uploads/2016/05/jane-jacobs-google-doodle.jpg» thumb=»http://www.guillodietrich.com/wp-content/uploads/2016/05/jane-jacobs-google-doodle-620×349.jpg» width=»500″ align=»right» title=»jane-jacobs-google-doodle» frame=»true» icon=»image»] Su ideal era que el diseño del espacio contribuya a crear redes, lazos mutuos de confianza y colaboración que permitan también la resiliencia en tiempos de contingencia y crisis.
Otra cosa interesante de esta talentosa mujer es que fue una urbanista autodidacta: no era arquitecta, planificadora, ni ingeniera civil; todo lo que conocía de urbanismo era el resultado de su experiencia y activismo. Fue sumamente crítica del modelo que impuso el planificador Robert Moses en New York a mitad del siglo XX. Éste apuntaba a intervenciones de gran escala en el tejido urbano que destacaban la función del tránsito automotor por sobre la vida en el espacio público y que favorecían al vehículo particular por sobre el transporte colectivo.
Para Jacobs, las ciudades debían ser pensadas como ecosistemas en que todos los aspectos están conectados de manera sutil, no pudiendo entenderse sólo por fórmulas y estadísticas, sino a través de la observación “desde la visión del peatón”. [lightbox link=»http://www.guillodietrich.com/wp-content/uploads/2016/05/Jane_Jacobs.jpg» thumb=»http://www.guillodietrich.com/wp-content/uploads/2016/05/Jane_Jacobs-620×513.jpg» width=»300″ align=»left» title=»Jane_Jacobs» frame=»true» icon=»image»]
La pensadora neoyorquina quería una ciudad con diversidad y consideraba que las claves para conseguirlo eran:
1) Áreas con funciones múltiples: en todos los barrios una mezcla de residencias, oficinas y comercios que vuelquen a la gente a la calle en todo momento.
2) Espacios peatonales amplios: facilitar la experiencia de la persona a pie, favorecer el encuentro y las oportunidades para los comercios.
3) Densidad poblacional: una ciudad compacta optimiza la utilización del espacio público, del espacio verde y de los recursos en general (energía, transporte etc.)
Jane Jacobs fue una apasionada del urbanismo y una pionera de la movilidad sustentable. Dejó su legado, su marca, y hoy en día la tienen presente muchas personas que aman la ciudad como la amaba ella.