Están pasando cosas enormes en el transporte aéreo de Argentina que 5 años atrás hubieran resultado inimaginables. Las buenas noticias del sector se suceden todo el tiempo. La semana pasada las tuvimos todas juntas.
Tenemos un objetivo: que cada vez más gente vuele en el país, que cada vez más personas lo encuentren una opción accesible y conveniente. En el pasado la aviación comercial en Argentina estaba paralizada: no se permitía el ingreso de nuevas líneas aéreas, ni se otorgaban nuevas rutas ni se firmaban acuerdos bilaterales para aumentar las frecuencias de las rutas existentes. Nosotros nos propusimos revertir esa situación: convocamos a audiencias del sector (que no se celebraban desde el 2005) y les pedimos a las líneas aéreas interesadas que nos presentasen sus planes para volar en nuestro país.

El martes pasó algo maravilloso. Tenemos una nueva línea aérea volando en el país después de mucho tiempo: Avianca. Empezó a hacer la ruta Buenos Aires-Rosario con aviones turbo hélices completamente nuevos. También suman el martes 28 la ruta Buenos Aires-Mar del Plata con dos frecuencias diarias.

Pero esto no es todo: ese mismo día Andes inauguró dos nuevas rutas. Son Buenos Aires-Tucumán y una muy especial: Tucumán-Jujuy con un vuelo de 40 minutos para turistas argentinos y extranjeros que disfrutan de visitar los impresionantes paisajes de Purmamarca, el Valle de Siete Colores, Tafí del Valle etc. Andes empezó siendo una pequeña empresa familiar que hasta el 2015 viajaba a tres destinos. En sólo dos años pasó a viajar a 11. Esa es la Revolución de los Aviones.

Pero esto sigue sin ser todo: el jueves empezó a operar la línea aérea Amaszonas entre Corrientes y Asunción del Paraguay, haciendo que la ciudad litoraleña vuelva a tener vuelos internacionales después de 12 años. En lo que va de nuestra gestión ya sumamos vuelos internacionales a cuatro ciudades que antes no los tenían: Tucumán (a Lima, el aerpuerto de conexión más importante de Sudamérica), Neuquén y San Juan (a Santiago de Chile, la puerta aérea al Asia-Pacífico) y ahora se suma Corrientes.

Flyest está empezando a volar a Montevideo. A comienzos del 2018 también empezará a volar la empresa FlyBondi, que en estos días está trayendo su primer avión, y la empresa Alas del Sur. Durante el transcurso del 2018 también comenzará a operar en el país Norwegian, que hará la mayor inversión de una línea aérea fuera de su país de origen en la historia de la aviación comercial mundial.

¿Y por qué hacemos esto? Porque queremos que volar sea para todos. Como ocurre en Perú, en Brasil o en Colombia donde los aeropuertos son lugares más plurales, más democráticos, donde volar no es algo exclusivo de un pequeño grupo sino una alternativa accesible para la mayoría. ¿Y cómo lo consiguieron esos países? Generando las condiciones para que haya competencia, para que ingresen más empresas y la competencia genere más y mejores opciones.
La meta que nos propusimos fue duplicar la cantidad de gente que vuela en el país, pasando de 10,7 millones en el 2015 a 22 millones en el 2019. Y estamos bien encaminados: este año ya sumamos 2 millones nuevos de pasajeros. Y así cada vez más adultos y chicos sentirán esa emoción indescriptible del primer despegue.